jueves, 3 de abril de 2025

Los hijos de la Vida


Creo que todos nos alegramos cuando nuestros amigos tienen hijos. La alegría por la llegada del hijo de un amigo es un sentimiento natural que se puede expresar con orgullo y conmoción. Es como si los amigos se hubieran duplicados. Los vemos y vemos a ellos. Algunos con el tiempo, se parezcan o no, tienen sus gestos, su forma de andar, sus tic. Los amamos, los agarramos, los besamos... son también algo nuestro en la medida de que el amigo lo es también. Escribe Khalil Gibran, hablando de los hijos: "Tus hijos, son hijos e hijas de la vida deseosa de si misma". Tener un hijo es ampliarse, extenderse, ensancharse. Son parte de uno. Por eso darías tu vida por ellos, tengan la edad que tengan. 
El amor, en su estructura más auténtica, implica alteridad, es siempre un don, significa salida de sí para convertirse en entrega al otro. Nos recuerda Dan Brown, parafraseando las palabras del Evangelio: "Ningún amor es más grande que el de un padre por su hijo".  En principio parece una contradicción, ellos son hijos de la vida y a la vez los padres tienen el amor más grande hacia ellos.
Un padre, madre, ama inmensamente a sus hijos y sin embargo ellos no les pertenecen. La razón y el amor está dirigida al mayor beneficio del hijo. Al deseo del mayor esplendor de el mismo. Y por ello, por su libertad, uno abre la mano para que vuelen, y se separen. 
No nos queda más que aceptar y darle gracias a la Vida por haberles dado la vida. Lo demás depende de ellos.

 

¡Hasta la próxima, primero Dios!



P D. La amistad es una relación entre dos o más personas que implica dar y recibir cariño, apoyo, cuidado y proximidad física. Algunas de las bases de la amistad son la confianza, el apoyo emocional, la comunicación profunda y la aceptación del otro tal y como es. Ninguna amistad esta basada en el interés, sea cual sea éste.

martes, 1 de abril de 2025

Miguel Ángel

Hace unas horas he llegado de Arahal. Viniendo en el coche he disfrutado del paisaje por la vega de Carmona. El sol estaba a una hora de ponerse por el oeste. El verde de las espigas, creciendo después de tanta lluvia e iluminadas por la suavidad de los rayos de sol en ese momento, me daba una sensación de paz y serenidad extraordinaria que era acompañaba, en el viaje de vuelta, por la música de Radio Clásica. Si a eso se le añade la satisfacción del recuerdo de mi estancia en Arahal esta tarde, podría definirlo de un viaje único.  


Volvía a este pueblo después de haber estado este pasado domingo en él. Mi intención fue almorzar con Miguel Ángel, compañero, amigo, hermano mío. Estuve en la misa de once dónde el protagonismo de los niños elevaba la liturgia a una calidad increíble. Ellos, los catequistas y la originalidad de Miguel Ángel, hizo que viviéramos una Eucaristía cercana y profunda. 

Me quedé asombrado, porque los niños al llegar a la iglesia, antes de sentarse en sus bancos, pasaban por el sagrario. Unos se santiguaban solamente, y otros se quedaban un rato delante del sagrario. Me pareció un hábito que decía mucho de lo que se le invita a vivir en las catequesis. Y es más, algunos padres acompañaban a sus hijos al sagrario. 

Después, y como no estaba nada previsto, Miguel Ángel me propuso a ir a Montellano a almorzar. Nada, uno treinta y seis kilómetros. En el camino me propuso ir a El Bosque, el doble de kilómetros. Para no ser menos, le propuse ir a Ubrique, pueblo de mi padre, a visitar a Francisco, esposo de una prima hermana, y a sus hijos. Ni él ni yo tememos viajar. Es más disfrutamos conduciendo.

Hoy a Miguel Ángel lo han declarado, el Pleno del Ayuntamiento de Arahal, "Hijo Adoptivo", y lo han hecho por unanimidad de sus concejales: 6 no adscritos (eran del PSOE), 3 del PP y 8 de Adelante Izquierda Unida. La intervención de cada uno de los portavoces ha sido una alabanza a su actuación con las personas del pueblo. Han alabado su acogida a los emigrantes que no encuentran sitio en albergues. Ahora tiene en su casa a cinco personas. También por recibir en el verano a niños Saharauis, de Bielorrusia, de República Dominicana... De estar preocupado por la falta de vivienda para los que no tienen posibilidad de alquilar o comprar una. Se le ha reconocido cómo sacerdote el estar  atento a la necesidad de la gente, como hacía Jesucristo. El presentar el verdadero rostro de la Iglesia. La representante de Izquierda Unidad le ha dicho tal cantidad de calificativos que creo que ha acabado con todos los que se le podía decir.

El salón de pleno del ayuntamiento estaba completo. He echado en falta a algunas personas. Sé que invitaron al arzobispo a este acto. No ha venido. ¡Allá él! Podría haber mandado, si él no podía, a uno de sus obispos auxiliares, o al vicario episcopal de la zona. Habría sido una gran oportunidad de mostrar su respaldo a unos de sus sacerdotes que vive un estilo de Iglesia que le da luz y transluce la verdad del Evangelio encarnado en nuestro mundo. 

Después vino la intervención de homenajeado. Su sencillez de vida, su generosidad, su claridad en lo que él cree y cómo lo ha vivido en estos cuarenta y cinco años de estancia en Arahal, su humildad ante el reconocimiento que le hacía el Ayuntamiento, su fidelidad a un estilo que entiende que debe vivir, ha sido el centro de su intervención. Terminó con la frase del evangelio de Lucas (17,10): "Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que se os ha ordenado, decid: «Siervos inútiles somos; hemos hecho solo lo que debíamos haber hecho»".

Fue un verdadero placer estar al lado de él, después del acto, junto con sus hermanos presentes. En la calle se le acercaba mucha gente para felicitarlo por ese reconocimiento. Por mi parte, cuando ya me marchaba, y les decía a los amigos el por qué me encontraba en el pueblo, todos manifestaban su acuerdo con ese reconocimiento.

Ha sido un reconocimiento muy justo. Un acto emotivo, sobrio y justo. Me ha encantado participar con él. El alcalde, antiguo alumno mío, me dijo: "Y ahora a ti te pondremos una calle". "Ni de broma", le dije. "Con este reconocimiento a Miguel Ángel, ya tengo bastante."

¡Hasta la próxima, primero Dios!



Hay que perdonar alguna referencia no exacta.

¡Por fin aprendí cómo se pone un vínculo en mi blog! ¡Poco a poco, Alfredo!

martes, 25 de marzo de 2025

Un santo rey

Tengo una amigo, un hermano del libro de la vida, que se llama Fernando. ¡Hola! Quizás sea eso lo que me ha hecho escribir esta crónica. Una de mis costumbres desde hace unos meses es dormirme escuchando videos de personajes de la historia. ¡Me encanta! ¡Así me duermo! Al despertarme intento volver al momento en el que ya no me acordaba haberlo escuchado. Y vuelvo a la historia de ese personaje. 

Al buscar qué personaje escuchar, se me ofreció por YouTube el de Fernando III el santo. Me puse a escucharlo y en la narración aparecía una serie de acontecimientos que hacían casi imposible que Fernando III hubiera llegado a ser rey. Y mi pensamiento fue: ¿Si no hubiera sido rey, habría sido canonizado?

Una de mis aficiones que  tengo, desde que estudié la asignatura de Historia de la Edad Media, es la genealogía de los reyes: año en el que fue rey, año de su muerte, con quién se había casado e hijos que tuvo. Sabía que Fernando III fue hijo de Alfonso IX de León y de Berenguela I de Castilla; así como cuando nació, llegó al trono y murió. Pero no sabía que las posibilidades de que este fuera rey eran muy pocas. Y para ello he buscado cuáles eran estas.

1º Ya Alfonso IX tuvo problemas para ser rey. 

Como el matrimonio de sus padres fue declarado nula por consanguinidad de los contrayentes, los hijos habido en el matrimonio eran ilegítimo. Su madrastra Urraca López de Haro, tercera esposa de Fernando II, aspiraba entronizar a su propio hijo, el infante Sancho.

Pocos meses después de su matrimonio con Fernando II, rey de León, que duró unos nueve meses, Urraca, que sabía que se acercaba el final de la vida del rey, quiso elevar al trono de León a su único hijo superviviente, Sancho Fernández de León, en perjuicio del infante Alfonso, hijo primogénito de Fernando II y de la reina Urraca de Portugal. 

Para lograr su propósito, sostuvo que el nacimiento del infante Alfonso era ilegítimo ya que el matrimonio de sus padres había sido anulado debido a los lazos de sangre existentes entre ambos cónyuges. El rey Fernando II, desterró entonces a su hijo primogénito, lo que supuso un triunfo para su madrastra, que se esforzó en que su hijo Sancho heredase el trono a la muerte de su padre, aunque dicha pretensión obtuvo pocos apoyos, incluso entre sus parientes, debido a la corta edad del infante. Urraca también se enfrentó a los Traba que defendían los derechos del infante Alfonso, que se había criado con ellos; así como con los Lora, hijos de Teresa Fernández de Traba de su primer esposo y segunda esposa del rey Fernando II. Los hijos de este matrimonio no vivían a la muerte de su padre. Debido a esta situación y la decisión de Alfonso IX, éste llegó a ser rey.

2º Fernando III tenía otro problema para ser reconocido para llegar a ser rey.

Su padre Alfonso IX se casó primero con Teresa de Portugal, matrimonio que fue anulado por consanguinidad. De este matrimonio nacieron Sancha, Fernando y Dulce. Después con Berenguela hija del rey de Castilla Alfonso VIII, de quien tuvo, entre otros hijos, al infante Fernando (Fernando III). Este matrimonio fue anulado por el mismo motivo. 
El primer hijo varón de Alfonso IX, llamado Fernando, murió cuando tenía veinte años en 1214, dieciséis años antes que su padre, sin descendencia. 
En 1217 tras la muerte de Enrique I y Fernando III se convierte en rey de Castilla tras la abdicación de su madre. Sobre cómo su madre se convierte en heredera de su padre, hablaremos más adelante. Debido a esto padre e hijo se distanciaron y le llevó a dejar el reino en manos de Sancha y Dulce, hermanastras de Fernando III, aspecto que iba contra las leyes consuetudinarias de los reinos de Castilla y de León.
Las madres de Fernando III, Berenguela, y la de Sancha y Dulce, Teresa de Portugal, llegan a un acuerdo de recibir una pensión vitalicia y unas ciudades, por las que estás renuncian a sus derechos, tras las amenazas de Fernando III. Así éste se convirtió en rey de León uniendo los dos reinos.
3º Y qué decir de los hechos que tuvieron que ocurrir para que su madre Berenguela fuera reina de Castilla.
Berenguela era la primogénita del matrimonio entre Alfonso VIII y Leonor de Plateneget. Este matrimonio tuvo 10 hijos. El sexto y el décimo fueron varones que tenían el derecho de suceder al padre antes que las mujeres. El sexto murió a los tres años cuando su padre aún vivía. 
El décimo, Enrique I, llegó a ser rey de Castilla, pero murió a los trece años tras tres años de reinado en minoría de edad. Al ser la primogénita Berenguela fue proclamada reina, quien al mes abdicó en su hijo Fernando III que tenía dieciséis años, dos años más de lo que por aquel entonces se situaba la mayoría de edad. 
Sí, por la dos ramas, se tuvieron que dar un cúmulo de situaciones para llegar tanto los padres, como él mismo, a ser reyes. 
Y mi cuestión queda en el aire; ¿Hubiera llegado a ser santo Fernando III sin haber sido rey? Es posible, claro que sí, aunque creo que sin tanta repercusión y ahí queda la cuestión. Eso sí, el nombre de Fernando era ya común en Castilla y en los otros lugares donde se instalaron los visigodos. 

Recreación de la imagen de santa Teresa, reina de León,
en una ilustración que la pinta con la corona
que perdió al anular su matrimonio con Alfonso IX.

¡Hasta la próxima, primero Dios!


jueves, 13 de marzo de 2025

Siempre dispuesto

No es fácil encontrar un título a las crónicas que subo. A veces uno acierta y otras veces no tanto. Y es que como la vida me ofrece momento tan diferentes, englobar lo que he vivido en estos dos días no deja de ser difícil. Estos dos días, ayer y hoy, he vivido momentos, como digo muy diferente.

El de ayer tuvo una preparación de casi dos días muy intensos. También los anteriores había que ir planificándolo. Ayer recibí a tres matrimonios amigos a comer en casa. Ya dije que me encanta tanto vivir sólo como acompañado. 

No tengo que decir, sobre todo a los connacionales, que estamos viviendo una días dónde la lluvia no cesa. El hecho de saber, casi a ciencia cierta, que el día de la cita iba a llover, dirigía toda la preparación del encuentro. No podíamos salir a visitar el entorno en el que vivo, tan bello y lleno de vida.  Lo que limitaba el encuentro a la propia casa. 

Tengo que decir que mi casa tiene como tres ambientes diferenciados. La casa propiamente dicha: Comedor-cocina, dormitorios y baños; las terrazas al aire libre, que si hubiera hecho un día soleado hubiera sido el sitio ideal para realizar el almuerzo; y el espacio de la chimenea y de la biblioteca, más caliente y acogedor. 

Llegaron mis invitados y ya tenía preparada le almuerzo. Les había indicado a mis amigos que se limitaran a aportar vinos y postres.  La comida la empecé a prepara el lunes, el martes fue un día más intenso y reservé para la mañana los últimos recortes. 

Pero ¿Quiénes eran estos? ¿Por qué esta dedicación? Bueno a Laura la conocí cuando tendría dieciséis o diecisiete años, en los últimos años del franquismo,  como integrante de un movimiento de niños de la Acción Católica, el Junior. Casi toda mi vida nos hemos ido viendo, porque después coincidimos en otro movimiento de adultos de la Acción Católica, la HOAC.  Al marido, Miguel, también hace un montón de años. A las mujeres de  de las otras dos parejas Loli y Marisa, pertenecientes a esta organización , las conocía más profundamente  porque éramos compañeros del mismo colegio de primaria, en Arahal. Allí vivimos los cincos y el conocimiento y la amistad se sellaron  profundamente junto a sus maridos Manolo y Aurelio. Con los tres  matrimonios mantengo una gran amistad, aunque  los encuentros no hayan sido continuos. Como con el buen vino la antigüedad asegura la bondad y, en el caso de las personas, asegura la amistad. ¡No es necesario verse para quererse! 

Y pasamos unas horas encantadoras. Primero visitando la casa y después comiendo lo que les había preparado y bebiendo el vino de Rioja que trajeron, que era del bueno. Y también con la comunicación que tuvimos. Hablamos de casi de todo. Ésta iba surgiendo espontáneamente. Y  Así pasaron las horas. 

El buen sabor de boca que nos produjo el encuentro se manifiesta en los mensajes recibidos unos de viva voz a través del teléfono y otras escritas a través del wasap. Al mandarme la foto que encabeza esta crónica: Aurelio me escribía: "prueba documental que atestigua la primera visita a  don Alfredo en San Nicolás. ¡Un día estupendo que tendremos que repetir! Un abrazo". Miguel por su parte me decía:"... Aprovecho para decirte que ayer pasamos un día magnífico. GRACIAS"Y tras despedirlos la casa se llenó de un silencio que estaba lleno de satisfacción y gratuidad.

Con la mejor sensación que dejó el encuentro de ayer me disponía hoy a ir a Córdoba a una exposición de cuadros de acuarelas. La había organizado La Asociación Andaluza Internacional de Acuarela. Estando en Guatemala, mi amigo Juan Manuel Sanz me entregó dos pinturas, una de él y otra de otro pintor guatemalteco, para participar en esta exposición. Así lo hice y le prometí ir a verla. 

Para ello llamé a Carmen Rosa. No imagino ir a Córdoba y no estar con ella. Me estaba esperando en la puerta de la Diputación de Córdoba donde se estaba celebrando esta exposición. Allí disfrutamos de los diferentes cuadros expuestos como de los que estaban pintado en ese momento las personas allí presente.

Esto me dio la posibilidad de hablar con ella y ponernos al día de nuestras vidas. Al igual que con los de ayer la conversación surge pronto pues nuestra amistad hace ya unas décadas que existe.


¡Hasta la próxima, primero Dios!


lunes, 10 de marzo de 2025

Pasaron


Este viaje a Guatemala Ha sido, quizás como todos, realmente bueno. Además de pasarlo bien, quizás sea el que mas he disfrutado. Creo que siempre digo lo mismo al final de cada uno. Claro que es la manera que tengo de ver las cosas. Hasta lo que no sea para disfrutar intento vivirlo positivamente. He vivido momentos extraordinarios, únicos. Y he pensado que esto me ha ocurrido bastante a lo largo de mi vida. Algo que para mi han sido realmente fuera de lo común. Y pensando, pensado, decidí ponerlo por escrito.

1º He saludado a un papa. Es posible que  mucha gente que lo haya hecho, pero para mí es, fue, algo extraordinario. Hablar con él, decirle de dónde era y cuál era mi tarea. Fue durante mi estancia de tres años en Paris y sucedió en diciembre del 1991. Al estrecharle la mano la sentí muy blanda. Siempre lo he recordado. Estuve mucho tiempo estrechándosela. ¡Ah! Todos me había dicho que debía ir vestido con clériman a esa audiencia. Yo obedecí a mi manera.

2ª Si lo anterior fue para mí extraordinario. Esto fue inédito.  He vivido en un Palacio Presidencial, he viajado en un avión presidencial he ido en automóvil con el presidente de una Nación. El país, Ecuador, y el presidente, Rafael Correa. Lo conocí en París en el 1990 cuando era estudiante de una master de economía en la universidad de Lovaina la Nueva en Bélgica y yo era consiliario internacional del MIDADEN, en París. Visité ese país y estuve con él en  2008 y 2015 y varias veces en el periodo 2016 y 2017 cuando terminé mi voluntariado en Guatemala y fui a él como asesor del Ministerio de Educación de Ecuador durante un curso.

3º Me han mordido dos veces alacranes. La primera vez en 2015, se había metido en un bolsillo de la mochila y al sacar las cosas me mordió en la mano. Llegó a venir el médico de los bomberos voluntarios. Sentí como una descarga eléctrica. 
La última vez hace a penas un mes. Ese estaba en un pantalón corto. Me pico donde me picó. Pero era más pequeño y el dolor fue menos intenso.

4º He dado casi dos veces la vuelta al mundo. Una desde Paris a Australia ida y vuelta. Otra desde Madrid a Isla de Pascua ida y vuelta. La primera en 1991 a una asamblea internacional de JOC y en 2015 a otra del MIDADEN. He visitado treinta tres países de los cincos continentes.

5º Creo que he sido el sacerdote que ha recibido en nueve meses todos los ministerios y ordenaciones necesarias. Ministerios de Lector y Acólito y ordenación de Diácono y Presbítero. Todo esto sucedió entre el mes de octubre de 1979 y el mes de junio de 1980.

6º También he sido un afortunado al poder ver lugares y monumentos impresionantes: Pasear por la muralla China, subirme a las pirámides de Egipto, tocar a los Moais de Isla de Pascua, ver las cataratas de Victoria entre Zambia y  Zimbabue, rodear el Partenón de Atenas, ser recibido en los palacios del Vaticano, subir al Monte Saint-Michel,  navegar hacia la isla de Jersey, llegar a la villa de Llívia, descubrir los restos de Pompeya, entrar en los monumentos megalíticos de Hagar Qim en Malta, almorzar en los bares de la Ópera de Sídney, quedarme con las ganas de subir las escalinatas del templo de Chichén Itzá en el Yucatán ya que está prohibido, vivir y recorrer la isla de Roatán en Honduras, bañarme en los afluentes Ucayali y Cuyabeno del río Amazona en plena Selva amazónica del Perú y del Ecuador, y sentirme emocionado al asomarme al hoyo provocado por la caída de las torres gemelas de Nueva York.

7º He estado en fiestas o momentos socio culturales como la plaza de Jema-el-Fna de Marrakech, en la fiesta de la cerveza de Múnich, en la fiesta de la Cruz en Maalula en Siria, pasar en barco de Bolivia a Perú por el lago Titicaca.

8º Me han puesto un fusil en el estomago un soldado sirio en el Líbano. Me han cogido por el cuello para tirarme al Río Dulce en Izabal. He estado al lado de la explosión de un artefacto en la embajada de EEUU en Lima. He tenido tres grandes  accidentes de tráficos en las que en dos de ellas el coche se declaro perdida o siniestro total. Mi hermano Carlos evitó que me ahogara en el río Guadalquivir en el 1964 al tirar de mí cuando me llevaba la corriente. Me enfrenté a un policía nigeriano que se quería quedar con los dólares que llevaba en la cartera, al que le agarré la mano y dije: "For me". ¡Qué inconsciente!

9º Y no digamos de lo que hasta hoy me he librado. Estas son las enfermedades que he tenido: Fiebre tifoidea cuando era niño, Angina de pecho en el 1992, dos cólicos nefríticos, hepatitis C, carcinoma papilar tiroides, y de los herpes Zoster no hablemos. Y ahora tengo un linfoma macroglobunemia de Wasdestro entre otras cosas. 

10º He recorrido el museo del Vaticano, el British Museum en Londres, la Galería Nacional de Arte en Washington, el Museo del Louvre en París, el Museo del Prado de Madrid y el museo de Bellas Artes de Sevilla, ¡cómo no! Me hubiera gustado visitar el State Hermitage de San Petersburgo y el de Berlín, quizás el único que pudiera visitar en el futuro.

Todo esto es para mi igual que saludar a Catalina, Esperanza, Maruja, María, Amelia, Robledo... y darles un beso y recibirlo. O estar en mi casa viendo el Galindón desde la ventana. O tomarme una cerveza en el Loli, en La Mina o en el chiringuito. O recibir a mis amigos para un almuerzo o una cena.

Lo enumerado anteriormente han sido momentos únicos, pero ser feliz en la vida cotidiana, tener muchos y buenos amigos de todas las edades y condición y pertenecer a una familia unida y cercana, eso, es  realmente vivir, lo que merece ser celebrado.

Quizás un día me atreva a escribir otros momentos no tan extraordinarios, pero que me han ayudado a descubrir la cara oculta y sufriente del mundo.

¡Hasta la próxima, primero Dios!


sábado, 1 de marzo de 2025

Vuelta

Dejé mis crónicas con mi viaje de vuelta a Sevilla. El gran acto de servicio de Emilio en mi acceso al aeropuerto de la Aurora ha llamado mucho la atención de los lectores. Emilio me ha escrito dándome las gracias. 

Esto me envió: "Hola Alfredo. Acabo de leer el blog. De verdad muchísimas gracias por esas palabras. Se siente bonito poder haberte ayudado. Te cuento que ese mismo día después de dejarte en el aeropuerto fui a ayudar a pasar motos en un lugar de tierra. Así terminé ese día JA JA (y muestra sus ropas todas manchadas).  ¡Pero que bonito, de verdad! Ya se lo estoy enseñando a toda mi familia" 

El viaje se me hizo más corto que el de ida. Vi dos películas que me gustaron mucho: "El Cardenal" y "Jurado número dos", que junto con el tiempo que dura el servicio de la cena después de salir de El Salvador, cuando me di cuenta me quedaban sólo cinco horas para llegar a Madrid. De Madrid a Sevilla se me hizo largo, pues tuve que esperar cinco horas en Barajas. Pero todo bien en general.

Lo más importante en lo que participado en estos últimos días de Febrero es en los XXV aniversario de la ordenación como diácono permanente de mi amigo paradeño Antonio Bejarano. Un momento muy importante para él que sigue realizando su ministerio con las  actitudes evangélicos de servicio y comunión. Fue muy importante su homilía en la Eucaristía, recordando tanto su vocación como todos estos años en los que ha realizado su tarea diaconal. 

Rodeado de sus "mujeres" - esposa, hija y nieta -, y de muchos amigos y miembros de la comunidad parroquial, todo fue intenso y vivencial. 


En la otra celebración festiva que siguió después de la eucaristía pude compartir con varios amigos de Paradas a los cuales no veía desde hace muchos años.  Siempre mi gratitud Antonio por tu amistad y por tu testimonio. 


¡Hasta la próxima, primero Dios!



jueves, 20 de febrero de 2025

El ballet de las gaviotas


No sabía los nombres de las diferentes aves que veía en mi paseo mañanero por la orilla del mar. Los primeros que vi eran unos pequeños. Un poco mayor que lo gorriones. Estaban picoteando en la zona húmeda que dejan las olas al retirarse
Después unos mayores que estos. Les llamé los gorrones. Iban donde estaban los primeros, que eran más, comiendo en el borde del mar y los alejaban para comer ellos lo que habían descubierto los pequeños. ¡Siempre es así! Los grandes comen a costa de los pequeños. Estos no se inmutaron por mi presencia. Mas adelante había, siempre a la orilla del mar, una bandada grande de pájaros blancos. Su tamaño serían como el de las palomas. Más grandes y voluminosos que los segundos. Al acercarme vi que eran gaviotas. 
Estas se iban acercándose a la playa conforme me acercaba a ellos. 
Algunos empezaron a volar, pero para ponerse más lejos dentro de la bandada.  Conforme iba andando se aproximaban a la orilla. Cuando me alejaba, volvían a su anterior sitio. Parecían que fuera un ballet.
Cuando me separaba de ellos, alejándome de la orilla, me encontré en la arena unos pajarracos grandes, como buitres, que pareciera no importarle mi presencia, pues me acercaba a ellos y no se iban. Eran seis. Andaba y andaba y nada. Cuando iba estando cerca, uno emprendió el vuelo. Al rato otro. Yo seguía aproximándome a los que quedaban. Y claro volaron uno, otro y otro. Se quedó el más confiado, el más valiente, el más desafiante... Y casi cuando quedaban dos ó tres metros desplegó sus alas y se fue. Más adelante supe su nombre: zope.
El Coragyps atratus es un ave carroñera, con setenta y cuatro de longitud, uno con sesenta y siete metros de envergadura y un peso promedio de entre dos (macho) y dos con setenta y cinco kg (hembra). Su plumaje es principalmente negro lustroso. La cabeza y el cuello no tienen plumas y su piel es gris oscuro y arrugada.
Mientras, llegué al final de la bandada de las gaviotas que seguían haciendo el mismo movimiento de alejarse de mí aproximándose a la mera orilla del mar.
Tengo fotos de otras aves que se encuentran en el puerto.
Y conforme iba sucediendo iba yo narrándolo en mi mente para ahora ponerlo por escrito el cuarto día de mi estancia en Tilapa.
Esto lo escribí ese día aunque hasta hoy no lo ha subido al blog.


¡Hasta la próxima, primero Dios!