lunes, 21 de agosto de 2023

Agosto 2023

Como ya he escrito en otras crónicas, no me planteo en el verano salir de mi casa, de mi pueblo. San Nicolás tiene un atractivo particular en cada una de las estaciones. En verano es un lugar elegido por muchas personas para pasar estos meses. Ello hace que se duplique la población, haya más gente en la calle y hay una oferta cultural realmente impresionante. 
La casa me ocupa una parte de mi tiempo durante este mes, en especial el cuidado de las macetas, del huerto, el yacusi.
Hay que regar, dos veces al día, para mantenerlos bien cuidado. Este año he podido conseguir que estén realmente muy bien. Los ciruelos han dado tanto fruto, que a pesar que se han recolectado por muchos, aún quedan en los árboles. Los tomates están maduros. Ya están los primeros.  Los pimientos, por otras parte, están en su punto. Un poco más tarde estarán los membrillos.
Además, el verano, es el momento ideal para el encuentro con familiares y amigos, lo que viene siendo normal. Las relaciones con ellos me encantan y durante el verano son más fáciles. 

Con la familia




Con amigos

 
Con amigos ex-alumnos



  Y en otras actividades


En la cena de la tercera edad en tiempo de feria.

En la segunda vez de música en las azoteas de mi casa.

Y aún quedan unos días para que termine. Tengo tantas actividades que debo esperar un periodo de calma para escribir estas crónicas.

¡Hasta la próxima, primero Dios!


Algunos rones de Centroamérica
que nos sirvieron para una cata
en familia.


Visos de esperanza

Hoy me he despertado con la noticia de que en los dos países dónde he vivido en Hispanoamérica (Latinoamérica es una invención francesa del siglo XIX https://journals.openedition.org/etudesromanes/5141), donde se han celebrado elecciones este domingo, no han ganado los partidos oficiales. Algunos amigos de aquí se apresuraron a felicitarme. ¡Me hizo mucha ilusión!

En Guatemala ha sido definitivo según los resultados provisionales en la segunda vuelta. En Ecuador ha ganado en la primera vuelta, pendiente de los resultado de la segunda.

GUATEMALA


Este domingo, en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales de Guatemala, se proyecta la victoria aplastante de un activista anticorrupción, lo que significa un impactante castigo al establishment político conservador de la nación más poblada de Centroamérica.
Bernardo Arévalo, un sociólogo políglota de un partido emergente compuesto en su mayoría de profesionales urbanos, obtuvo el 58 por ciento de los votos, tras el 98 por ciento de los votos escrutados el domingo, según anunció la autoridad electoral. Su rival, Sandra Torres, una ex primera dama, obtuvo el 37 por ciento de los votos.
Alejandro Giammattei, el actual presidente, a quien la ley le prohíbe buscar la reelección, felicitó a Arévalo y lo invitó a organizar una transición ordenada del poder.
La victoria de Arévalo marca un punto de inflexión en Guatemala, una de las principales fuentes de migración a Estados Unidos y una de las naciones aliadas de Washington en la región desde hace mucho tiempo. Hasta el momento en que Arévalo logró colarse a la segunda vuelta tras un sorprendente resultado en la primera vuelta realizada en junio, lo que había moldeado la convulsa campaña había sido la descalificación por parte de las autoridades judiciales de muchos otros candidatos percibidos como amenazas para las élites en el poder del país.
Defendiéndose contra esas tácticas, Arévalo hizo de la lucha contra la corrupción el enfoque central de su campaña. Ésta se encuentra arraigada en todos los niveles del Estado.
Se dedicó al escrutinio de cómo la frágil democracia de Guatemala, plagada en repetidas ocasiones de gobiernos envueltos en escándalos, ha pasado de implementar estrategias anticorrupción innovadoras a clausurar dichos esfuerzos y forzar a jueces y fiscales a huir del país.

Arévalo, de 64 años, un moderado que ha criticado gobiernos de izquierda como el de Nicaragua, es percibido de todos modos en el entorno político conservador de Guatemala como el candidato más progresista en llegar hasta estas instancias desde que se restableció la democracia en 1985, tras más de tres décadas de gobiernos militares.


Obteniendo gran parte de su apoyo de votantes en las ciudades, la campaña de Arévalo contrastó con la de su rival, quien se enfocó en gran medida en la delincuencia y prometió emular en Guatemala las medidas severas contra las pandillas que ha aplicado Nayib Bukele, el presidente conservador de El Salvador. Torres también resaltó temas sociales — oponiéndose a la legalización del aborto, el matrimonio igualitario y la marihuana — y apoyó el incremento de la asistencia alimentaria y monetaria a las comunidades pobres.

Estas elecciones marcan el intento fallido más reciente de Torres, de 67 años, quien es exesposa de Álvaro Colom, quien fuera presidente de Guatemala de 2008 a 2012. En 2011 se divorció de Colom, buscando eludir una ley que prohíbe que los familiares del presidente se postulen al cargo. (Colom falleció en enero a los 71 años ).
Aunque se le prohibió postularse en esas elecciones, Torres quedó en segundo lugar en las dos elecciones presidenciales previas. Después de las elecciones de 2019, fue detenida bajo cargos de financiamiento ilícito de campaña y pasó un tiempo bajo arresto domiciliario. Sin embargo, un juez cerró el caso a finales del año pasado, lo que le permitió postularse a estas elecciones.
A pesar de algunas diferencias obvias, Arévalo y Torres coincidieron en algunos temas. Ambos candidatos, por ejemplo, llamaron la atención sobre la escasez de infraestructura decente en Guatemala. Fuera de Ciudad de Guatemala, la capital, el país carece de carreteras en un buen estado. Ambos candidatos propusieron construir miles de kilómetros de nuevas carreteras y mejorar las existentes. Quienes las sufrimos pensamos que es una necesidad urgente. Ambos también se comprometieron a construir la primera línea de metro de Ciudad de Guatemala.
Aun así, Arévalo simboliza un quiebre con la manera tradicional de hacer política en Guatemala. Habrá que estar atento a cómo los poderes de siempre le deja gobernar. La contienda se desarrolló en medio de una represión por parte del actual gobierno conservador contra fiscales, jueces, organizaciones sin fines de lucro y periodistas como José Rubén Zamora, el editor de un periódico importante, quien fue sentenciado en junio a hasta seis años de prisión.
Si bien el presidente Giammattei, ampliamente impopular, tiene prohibido por ley buscar la reelección, las preocupaciones sobre un descenso hacia el autoritarismo se han agravado a medida que ha expandido su poder sobre las instituciones del país.
Esta fragilidad institucional se manifestó el domingo. Blanca Alfaro, una magistrada del Tribunal Supremo Electoral, órgano que rige las elecciones de Guatemala, declaró que planea renunciar en los próximos días debido a lo que, afirmó, eran amenazas en su contra. Gabriel Aguilera, otro magistrado del poder electoral, afirmó que también había recibido amenazas. Creo que esta victoria no les ha caído nada bien.
Antes de los resultados de Arévalo en la primera vuelta, la victoria de algún abanderado del establishment parecía casi segura. Pero las descalificaciones de varios contendientes, en lugar de beneficiar a los candidatos predilectos del poder establecido, abrieron un camino para Arévalo.
Tras lograr pasar a la segunda vuelta, los esfuerzos consiguientes para evitar que siguiera postulándose a la presidencia por parte de un fiscal - a quién Estados Unidos ha ingresado en una lista de funcionarios corruptos - también fracasaron, ya que motivaron llamados de figuras políticas guatemaltecas de todo el espectro ideológico para que Arévalo continuara en la contienda. En política su partido se podría considerar como los demócratas en Estados Unidos.
Arévalo, un intelectual que es hijo de Juan José Arévalo, un expresidente que todavía es reconocido por haber creado el sistema de seguridad social de Guatemala y proteger la libertad de expresión. Luego de que su padre fuese obligado al exilio en la década de 1950, Arévalo nació en Uruguay y creció en Venezuela, Chile y México antes de regresar a Guatemala siendo un adolescente. Era miembro del Congreso cuando su partido lo eligió este año como su candidato.
En los últimos días, el fiscal que intentó evitar la candidatura de Arévalo, Rafael Curruchiche, revivió su intento de suspender el partido de Arévalo. Citando, lo que el fiscal describió como irregularidades en el proceso de recolección de firmas para la creación del partido, Curruchiche afirmó que podría suspender al partido después de las elecciones del domingo y emitir órdenes de arresto para algunos de sus miembros. Una medida de este estilo debilitaría rápidamente la capacidad de Arévalo para gobernar. Como siempre el poder de la oligarquía pisando la libertad con el apoyo de la fiscalía, de las altas jerarquía del ejército y de su control de la economía y de los bancos. 
Otra señal de inquietud fue el alto nivel de abstención en la segunda vuelta; el 45 por ciento del electorado votó. Un país con alto índice de población nativa no ha logrado la incorporación de esa mayoría al proyecto nacional.

Arévalo se ha comprometido a mitigar la pobreza en Guatemala, uno de los países más desiguales de América Latina, a través de un programa de creación masiva de empleos destinado a mejorar las carreteras y otras infraestructuras. Esto es algo imprescindible para el despegue económico. También prometió aumentar la producción agrícola proporcionando préstamos a bajo interés a los agricultores.
Arévalo ha enmarcado estas propuestas como alternativas para evitar que los guatemaltecos emigren a Estados Unidos, donde figuran como uno de los grupos migrantes más grandes. Muchos de mis amigos han tenido, o tienen en mente, ir a los "estados". Varios factores alimentan la emigración, incluidas las nulas o bajas oportunidades económicas, la extorsión, la corrupción de los funcionarios públicos y la delincuencia.
Arévalo ha hecho de la lucha contra la corrupción y la impunidad el enfoque central de su campaña. Se ha distanciado de sus rivales que buscan emular el tipo de medidas duras contra las pandillas que ha implementado el presidente conservador del vecino El Salvador, alegando que los desafíos de seguridad de Guatemala son diferentes en tamaño y alcance, donde la actividad de las pandillas está concentrada en ciertas partes del país. Arévalo propone contratar miles de nuevos policías y mejorar la seguridad en las prisiones.
Muchos amigos que tengo en Guatemala optaban por votar a Arévalo que es una rayo de esperanza en el futuro del país. 
¿Podrá gobernar y no será una esperanza fallida? ¿Le pasará, de una otra manera, lo que le pasó a su padre? Hay muchos intereses del poder fáctico en juego, pero... ¡Guatemala no puede esperar más!

ECUADOR



¿Quién va ganando en las Elecciones Presidenciales 2023 de Ecuador? Ecuador terminó este domingo una tensa jornada electoral para designar presidente y congresistas en medio de un gran despliegue de militares por el reciente asesinato de un candidato presidencial y la violencia de bandas narco. La autoridad electoral tiene hasta el 23 de septiembre para dar los resultados definitivos de unos comicios marcados por un inédito esquema de seguridad para los candidatos, que votaron con chalecos antibalas y cascos en medio de un estado de excepción. Según el Consejo Nacional Electoral, desde las 19:00 horas de este domingo, 20 de agosto se podrá conocer cómo va el avance del escrutinio.


Daniel Noboa.  Las encuestas no eran favorables a Noboa hasta el 13 de agosto. Luego del debate y los buenos comentarios post debate se reflejaron en las urnas.
Disciplinado, organizado. Esas cualidades del candidato Daniel Noboa que sus amigos y colaboradores refieren se revelaron en el debate presidencial del 13 de agosto, solo una semana antes de comicios. Desde la llegada al set captó el interés de la audiencia con un chaleco antibalas debajo del saco y la pulcritud de su imagen. El primer mensaje estaba expuesto sin haber siquiera pronunciado palabra: el país es inseguro y él busca enfrentar el problema desde el Gobierno.
Su lenguaje corporal y uso de la palabra mostró a un candidato que hace planteamientos sin atacar, sin polemizar con el resto de los postulantes. Esto fue valorado en la crítica ciudadana que observó a los demás aspirantes señalarse, acusarse y defenderse. Noboa ni siquiera tuvo necesidad de surfear las olas de la polémica porque hasta entonces su nombre parecía no representar competencia y casi era ignorado, excepto cuando le correspondía preguntar o responder de acuerdo con el formato del debate.

En su primera participación como candidata a la Presidencia de Ecuador, Luisa González Alcívar, de 45 años, pasó a la segunda vuelta electoral. La abogada es la representante del partido de la Revolución Ciudadana y su compañero de fórmula es Andrés Arauz Galarza (38) anterior candidato presidencial del partido.
Hasta las 20:25, de esta noche, se han escrutado el 35% de las actas válidas: González saca el 33.35%, la siguen Daniel Noboa con 24.35, Jan Topic con el 14.58, el partido de Fernando Villavicencio (asesinado hace más de una semana y su puesto lo ocupó Zurita) con 16.09

A los 23 empecé a estudiar en la Universidad Central en Quito, nunca hubiera querido salir de mi tierra, pero tuve que salir para tener una mejor educación”, contó la actual candidata por el correísmo nacida en Quito –dice- “por circunstancias de la vida”.

En la presidencia de Rafael Correa, González empezó su carrera en la función pública, donde suma unos quince años e incluye cargos en la Superintendencia de Compañías como directora de Recursos Humanos y luego como secretaria general; en el Ministerio de Relaciones Exteriores como coordinadora, secretaria 3, vicecónsul y más tarde cónsul general de Alicante (España); en la Secretaría de la Administración pública; en la Empresa Pública de Correos como asesora; en el Parlamento Andino como secretaria nacional y asesora; y en la Asamblea como legisladora.

La candidata tiene una maestría en Alta Gerencia y otra en Economía Internacional y Desarrollo, una de ellas se financió con un crédito del Estado (IECE) por $ 26.400, según reportó ante la Contraloría.

Con un discurso que evoca la década del correísmo, Luisa ofrece “seguridad, trabajo, bienestar”. En las entrevistas que acepta, la mayoría en radios locales y portales digitales, la única candidata mujer promete el “resurgir de la patria” y encabeza una campaña que tiene como ícono a un borrego, un término con el que la oposición utiliza para descalificar a los partidarios del correísmo. "Nos dijeron borregos, nosotros dijimos ‘bueno, orgullosos de ser borregos, soy la borreguita mayor", respondió Luisa, y también opinó sobre la corrupción en el régimen de Correa: "Casos de corrupción puede haber, que haya gente que tenga el corazón contaminado, que se le asigne un cargo público y que en vez de trabajar por la ciudadanía se corrompa y cometa actos de corrupción, puede ser, no se puede controlar a miles de servidores públicos".
También en la anteriores elecciones ganaron la primera vuelta, pero no la segunda, cintra todo pronóstico. Esta opción del correismo ha ganado las últimas elecciones a gobernadores y municipales. No hay segunda vuelta en esos casos. En la segunda vuelta puede no ser fácil que gane, pues la mayoría, y los más importantes, de los medios de comunicación - tanto la prensa, como la televisión - atacan sin tregua a la Revolución ciudadana y demonizan a Correa. Están en manos de los grandes poderes económicos que están centrado más en sus intereses que en el bienestar del pueblo. 
Los diez años en los que gobernó Correa fue la época de más desarrollo del Ecuador en todo los sentidos, como pude comprobar por mi mismo pues estuve en el país en el año 2008 y al final del mismo en el 2017.
Difícil, pues, el resultado de las próximas elecciones, aunque nunca perdemos la esperanza.
¡Hasta la próxima, primero Dios"