jueves, 3 de noviembre de 2016

Estancia provechosa

“Va a buscar a la que se había perdido”
Deja las noventa y nueve y va en busca de la que se había perdido. Le interesa todas y cada una de ellas. Y la que se queda atrás, o se separa del rebaño, tiene tanta importancia como cada una de las otras. Y le dedica un tiempo, un esfuerzo, porque le preocupa.
Y la lleva entre sus hombros. Y vuelve con alegría. Es el buen pastor. Así es Jesús. Así deberíamos tratar a todos.

Cuestión de médicos
Venir de Guatemala, dónde desgraciadamente la sanidad no está al alcance de la mayoría, y encontrarte con el sistema de salud de España, que puede ser uno de los mejores de Europa, me ha producido un choque personal muy grande.
No tener que pagar por un análisis de sangre 1000 quetzales o por un caja de medicina 350 quetzales o por una colonoscopia 2800… (un euro son 8,5 quetzales), es algo que quizás no sepamos valorar pues, aunque viene de nuestros impuestos, el sistema así lo permite. Sobre todo cuando se benefician de ello todos los ciudadanos. Es una gran conquista social, sobre todo para las personas de las clases menos favorecidas. Conquista que deben ser defendida con toda determinación.
Desgraciadamente allí, con sueldos entre 1000 y 2000 quetzales en la clases populares, la sanidad con un mínimo de garantía les resulta prohibitiva a ésta.
Aquí me he hecho dos análisis de sangre, una ecografía, y he tenido que acudir a cinco citas con médicos de diferentes especialidades, adquiriendo los medicamentos correspondiente.
Lo importante de ello es que me han dado prorroga para otros seis meses.
Compartiendo el tiempo
Además de médicos, con lo que comencé a visitar el mismo día que llegué y volveré a ver el último día de mi estancia aquí, mi presencia me ha dado la posibilidad de estar con familiares y amigos.
Después del encuentro familiar de comienzo de mi estancia aquí, los amigos, que están pendiente de mi llegada para ocuparme prácticamente toda mi estancia, han ocupado el resto de mi vida. Siempo es una gran satisfacción sentirse acogido.
Gracias a todos por vuestra cercanía, fidelidad y cariño en esta estancia dónde noticias tan interesantes van a posibilitar que continúe ampliando mis horizontes.
En estas fotos con algunos de los amigos con los que he compartido este tiempo.

  “Hasta la próxima, primero Dios”

No hay comentarios.:

Publicar un comentario