¡Hoy no hacía tanto frío! Así que después de comer, aunque retenido por la película que estaba viendo, salí a pasear.
Creo que hace mucho tiempo que me quedaba en casa. Bueno hace dos lunes salí con Charo y Rafael que vinieron a comer. Ese día cogimos el coche, tras almorzar, para ver las chorreras. Aparcamos cerca de la Fábrica de la luz.
Nos acercamos a las primeras caídas de agua cerca de los nuevos puentes de maderas que han instalados para poder cruzar el río más fácilmente. Al llegar, y de repente, vi una nutria que, caminando entre las piedras, terminó por sumergirse en el río. Era la primera vez que veía una. Siempre me habían dicho que existían, pero verlas es otra cosa. Así se confirmaban mis deseos de que en el río que pasa por delante de mi casa las hubiera. Aquel día no llevaba el móvil para hacer fotos. Tampoco hubiera servido de nada, pues fue verla y no verla.
Esta tarde me acordé de ello y la llevaba. Salí sin prisa y tomé el camino paralelo al río hay entre la ribera y los cercados de alambres de la fábrica de la luz. Pasear por él es algo magnífico, pues vas siempre en el silencio del ruido del agua. Sol, verdor, cascadas continuas de agua, pájaros saliendo de los árboles donde anidan, el sonido cerrado de los cencerros de las ovejas que pastan en los alrededores..., ¡la paz de la sierra!
Me acerqué al lugar dónde la vi. Iba durante todo el recorrido, despacio y sin hacer ruido, mirando hacia el río. A llegar al sitio me asusté porque había dos personas en él, también sin hacer ningún ruido. Se volvieron asombrados. Estaban bebiendo mate. Eso, junto con su entonación al hablar castellano, me llevo a concluir de dónde eran. Les dije el porqué llegaba tan silenciosamente. Y mantuvimos una conversación cordial, corta y general. Me despedí de ellos y comencé el regreso. Pensé: "Volveré otro día porque hoy el sitio está un poco concurrido". Crucé el puente nuevo, observé el maravilloso paraje dónde está ubicado y crucé a la otra parte del Hueznar.
Un inciso: Sobre la grafía del río que nace en San Nicolás del Puerto podemos encontrar también Huesna, muy "asevillanao", e incluso Güesna, en el libro de la Montería de Alfonso X. La Hidronimia es el estudio de los hidrónimos y de cómo las masas de agua reciben su nombre y estos son transmitidos a lo largo de la historia. Por lo que se pueden usar indistintamente una u otra grafía sin incurrir en ninguna falta de ortografía, aunque algunos filólogos apuntan a que se debería escribir Huezna, sin la "r" final.
En esta ribera, mientras se llega a la vía verde cerca de la entrada al túnel, hay que ir muy cerca de la alambrada pues de lo contrario hay posibilidad de acabar en el río desde una gran altura. En esta estación del año el bosque de galería nos deja ver su recorrido entre pequeñas cascadas. Hay pozas del río que son anchas en este curso del río. Me gustó recorrerla.
En la vuelta por la vía verde hay unos campos sembrados de cereales que le dan un aspecto increíble al paisaje bajo la luz tenue del sol invernal. Lugar excelente de paseo, en él saludé a Gonzalo y Maribel, y a Carlos que iba en bicicleta. Ya cerca del pueblo la vista del mismo era especial. Aunque en cada momento se ve encantador.
Con frío al pasar por las sombras de las casas de unas calles vacías me dirijo a calorcito de la mesa camilla de mi casa para ver alguna película o seguir leyendo. ¡Ya veré!
¡Hasta la próxima, primero Dios!