“Se le puso el nombre de Jesús”
El significado del nombre Jesús, que procede de Yesúa, quiere decir
Yahvé salva.
Sólo Jesucristo realiza lo que su
nombre significa, y lo hace en beneficio del hombre, al que viene a salvar.
El nombre de Jesús es elegido por
Dios, según anuncia el ángel Gabriel a María: “… y le pondrás por nombre
Jesús”.
El
nombre de Jesús es siempre estímulo para vivir, para trabajar por su Reino,
para mantener vivos el amor y la esperanza: “En tu nombre, echaré las redes”
Este es un nuevo, año, día nuevo
Me encanta esta canción de Facundo Cabral. Hoy es el día
primero de año. Es un nuevo día de un nuevo año. Y esta canción habla de la
grandeza de poder tener siempre un nuevo día.
¡Qué bonito mensaje que nos invita a tratar de ser, por fin y
para todos los días, una persona nueva! ¡Y ser felices! ¡Y seguir haciendo a
los demás felices! ¡Que poco costaría si tratáramos a los demás con el respeto
y el amor que se merecen! A mis familiares y amigos de aquí, de ahí y de allá: ¡¡¡Feliz año nuevo!!!
Una gran inversión que será muy rentable
Ya sabía de su existencia. Mi amigo tuvo mucho interés que visitara
una de ellas el último día que estuve aquí el año pasado. Me quedé impresionado.
Ahora, entre las distintas opciones
que se me dió para apoyar voluntariamente al Ministerio de Educación, se me
presentó la posibilidad de proponer un recorrido formativo para los directores,
rectores, de esas unidades educativas que son parte de la oferta educativa del
Estado ecuatoriano. Esta propuesta ha sido acogida y valorada por la Organización de Estados Iberoamericanos.
Estas unidades educativas, como se llaman en Ecuador los centros educativos, están concebida para dar una respuesta de calidad a los niños y jóvenes desde infantil hasta bachillerato.
Las unidades cuentan, además de las aulas y edificio
administrativo, de laboratorios de Física, Química, Ciencias Naturales y aulas de computación. Además tienen comedor y cocina, grandes espacios abiertos y deportivos
y una gran biblioteca. Algunos tienes residencia para los estudiantes que viven lejos de la unidad.
Los alumnos reciben gratuitamente los libros escolares y la
equipación tanto deportiva como escolar.
Personalmente este tipo de centros educativos que abarcan
todo el periodo escolar hasta la univesidad, me han gustado desde siempre: poder
programar todo el recorrido educativo de la persona desde la niñez más temprana
hasta la universidad.
Yo, que he sido director de un instituto en Alcolea del Río
(Sevilla), no entendí que existiendo en una localidad dos centros educativo, un
CEIP y un Instituto, tuviéramos dos proyectos educativos, máxime cuando ambos
eran públicos. Si tenemos por un lado la misma ley y por otra la misma realidad
a la que debemos atender desde el punto de vista educativo, lo único que
cambiaría es lo relativo a los distintos niveles educativos que cursan los
alumnos. Si no, pensemos en los colegios concertados cómo tienen una misma
dirección que, delegada y separadas en los distintos niveles, mantienen un
mismo proyecto con unas mismas autoridades educativas. Esto se ha querido
arreglar con el Programa de Transición que, en la mayoría de los casos, no deja
de ser una encuentro formal más.
Estas unidades educativas se sitúan, siguiendo el objetivo
del milenio sobre educación, en aquellas áreas dónde había más deficiencias de establecimientos educativos. El objetivo de que la educación sea para todos se
logra construyéndolas en los sectores más populares donde había menos iniciativa
privada, ya que estás no suelen gratuitas, y una respuesta pública muy deficiente, cuando la había.
El actual ministro de educación decía sobre su planteamiento:
“El primer objetivo es crear un efecto demostración, es decir, que los pobres merecen
lo mejor, lo contrario de lo que venía sucediendo, cuando se les daba las
migaja con escuela unidocente, más chiquititas y abandonas. Las escuelas del
milenio rompen ese paradigma como parte de la política de este gobierno”.
Hoy son más de 70 unidades ya en funcionamiento y otras
tantas en construcción.
Mis jóvenes amigos de la MillerQué alegría personal se siente cuando vuelves a conectar con
amigos que, por una o por otra causa, habías dejado de mantener la relación que
tenías antes. ¡Qué bien se siente uno! Sobre todo cuando hay algo muy especial entre
ambos. Claro que para ello está disposición debe ser mutua. Me encantó lo que
experimenté el jueves por la tarde-noche.
Además leí en facebook como mi amigo Joel David Tait, de la Finca Juvenil, me
mencionaba en facebook al decir que había aprendido de mí pedir los últimos asientos en
los buses porque no suelen ocuparse todos y se va más cómodo.
También cuando Miguel
Eduardo Domingo, más poeta, me dice que “siempre eres y serás esa persona que,
aunque no lo vea todos los días, es mi ánimo de cada día”.
Juan Pérez me dijo
que había aprendido de mí hacer amigos porque cuando se presenta siempre dice
algo gracioso para poder entablar una relación más fluida y agradable.
Y
Juliens André dice que al beber se acuerda de mí y que intenta siempre comer
cuando bebe… y que no hay que tomarse todas las latas de cervezas.
Pero hay algo especial cuando sigo manteniendo contacto casi permanente con estos amigos como Saraney, Rafael, Enrique, Julio, Pheter, Estuardo, Fonsi... y demás amigos de Huehuetenango.
Hay algo que cada uno dejamos en los demás. Y es agradable
pensar que nada queda en el olvido. Vaya pues mi agradecimiento a todos y cada
uno por lo que aprendemos de los otros.
¡Hasta la próxima, primero Dios!