Ayer dediqué parte del tiempo a podar los dos ciruelos. Lleva más tiempo recoger las ramas y las hojas que podarlo en sí. Hoy, antes que vinieran mis amigos, estuve recogiendolas. Podar me gusta. Me enseñó a hacerlo mi vecino Antonio durante dos años consecutivos. Me relaja y me lo paso bien haciéndolo. Mañana me dedicaré al madroño y más adelante,cuando se le caiga las hojas, lo haré con el membrillo. Estas actividades "agrícolas" ocupan en su momento un momento especial en mi horario.Les pedí a mis amigos que vinieran con tiempo para volver a hacer la ruta que hice con los amigos de sábado ya que las cataratas me parece algo explédido para verlas.
Estuvimos en las dos cataratas y más tarde fuimos a comer al restaurante La Mina en la barriada de San Nicolas del Puerto del Cerro del Hierro.
Por la noche he tenido ensayo de teatro y así terminó el día. ¡No me aburro, no!
¡Hasta la próxima, primero Dios!



No hay comentarios.:
Publicar un comentario